Manos arriba: ¡Esto es un Banco!

Cuidado con los atracadores. Click para ampliar.
Cuidado con los atracadores. Click para ampliar.

Espero que los mayas tuviesen razón y nuestra civilización acabe en 2012 porque, de otro modo, esto no lo aguanta ni el santo Job. Los gobiernos que, desde siempre, se han vendido a la banca, guardando las formas eso sí, ahora han decidido que ya somos lo suficientemente maduros como para no tener que esconderse y nos dan por culo a plena luz del día y sin la tradicional vaselina de las sonrisas y de las promociones. Con la connivencia de los gobiernos occidentales, se han quitado la careta, al tiempo que nos ponen a mirando pa’ Cuenca mientras que nosotros, indefensos, protestamos… pero nos dejamos hacer porque no nos queda otro remedio.

¡Joder con la banca! No contentos con ser los principales culpables de la crisis económica que todos sufrimos, se hacen financiar con dineros públicos sus deudas, unas deudas que adquirieron por querer enriquecerse de manera ilícita y, a pesar de que sus balances muestran ganancias, siguen llorando para conseguir más dinero mientras, por otra parte, niegan créditos a pequeñas empresas y autónomos con lo que, de manera directa, se hacen responsables de que las cifras del desempleo sigan creciendo en España.

Es curioso, por decir algo, que los rescates económicos de la CEE, hayan sido a las únicas naciones que todavía tenían gobiernos socialistas como Grecia, Irlanda o Portugal, y nadie puede negar que están como locos por “rescatar” a España y añadir, a la deuda que ya tenemos, una losa que terminaría por frenar nuestra economía durante años. Está claro que nuestro pecado, como país, ha sido crecer mucho más que lo que se había calculado. Mientras España ha crecido de manera brutal con el ladrillo y la especulación, no hubo problemas; pero cuando los gobiernos han tratado de frenar esas actuaciones, la banca comenzó su agresión a la clase media hasta conseguir que, a día de hoy, la calidad de vida en España haya disminuido a niveles preconstitucionales.

Las Cajas de Ahorros, que tradicionalmente ayudaban, se hacen financiar por el Estado para convertirse en bancos, reduciendo personal para ingresar más dinero y mantener sus ganancias. Y todo esto ¿por qué?, porque se han recibido órdenes de quienes tienen al mundo cogido por el paquete calzoncillar y hay que unificar la economía mundial para que ellos, los de siempre, sigan ganando más y más, mientras los demás ladramos a la luna.

Siguiendo estas órdenes, aumentamos la edad de jubilación, alargamos el tiempo de trabajo para tener derecho a un retiro digno y, ante el miedo de quedarnos sin una paga de vejez, nos vemos obligados a contratar planes de jubilación en los bancos. Siguiendo los dicterios de quienes realmente ostentan el poder, se produce un éxodo de empresas a hacia oriente, en donde la mano de obra es más barata, sin que ese descenso en los costos se note en el producto acabado… sin contar con que hay mucha mano de obra que es esclava o menor de edad. Siguiendo estas directrices inhumanas, se presiona a los gobiernos para facilitar el despido y fomentar los contratos-mierda que mantengan ocupadas a las masas sociales por menos de mil euros al mes, mientras ellos se reparten beneficios millonarios. Y para luchar contra esta política económica, no nos queda más que una solución. Luchar contra este modelo económico hasta que logremos cambiarlo. Recordemos que con el poco dinero que guardamos en nuestras cuentas, los bancos trabajan, compran propiedades inmobiliarias para abrir sedes y sucursales que, a pesar de ser adquiridas con nuestro dinero, pasan a ser de su propiedad.

Imaginemos un edificio de cien apartamentos. Uno de los vecinos, se encarga de almacenar el dinero de todos y, cuando la cantidad que guarda es suficiente, compra el edificio y, desde ese momento, todos los demás deben pagarle alquiler. Así trabaja la banca. Primero reúne dinero de todos, y luego, cuando alcanza un buen poderío económico, nos endeuda, nos somete y, posteriormente, nos esclaviza.

Pero… ¿cómo podemos luchar contra quienes nos tienen con el culo al aire y “prensados” contra la pared? Utilizando sus mismas armas: La presión económica y el descaro chulesco y sinvergüenza. Dejemos de domiciliar los pagos en los bancos, pidamos a nuestros empleadores que nos paguen en metálico, no utilicemos las tarjetas de crédito y, sobre todo, no abramos cuentas y, en cuanto sea posible, cerremos las que tenemos sacando el dinero depositado en ellas. Los bancos no tienen dinero, ni crédito, para reintegrar el total de lo que se supone que está depositado en sus arcas por lo que, si un día nos ponemos de acuerdo para sacar nuestro dinero, la quiebra de los bancos será total y efectiva.

¿Lo intentamos?